¿Cómo llegar?
Bases para situar esta ciudad en Langa
Taracena situó esta ciudad en el cerro de la Cuesta del Moro, al sur de la villa de Langa y a dos kilómetros del Duero, conjugando la cita de Estrabón de que el Duero pasa junto a Numantia y Sergontia, y la de Ptolomeo que sitúa Setortia Lacta entre las ciudades arévacas del convento jurídico de Clunia, entre esta ciudad, la de Termes y Vxama, lo que en unión de la leyenda de las monedas “Segontia Lanca” permite situarla junto al Duero. Además permite relacionar fonéticamente la Langa actual con Lanca antigua.
Trabajos de investigación
En este lugar llevó a cabo excavaciones arqueológicas Blas Taracena. En los trabajos de prospección realizados por este arqueólogo no detectó restos de muralla que le permitieran delimitar el área de la ciudad, por lo que pensó que se trataba de una ciudad abierta.
Según estos trabajos dedujo que no era ciudad de viviendas compactas, sino una yuxtaposición de caseríos aislados. Las casas eran de una sola planta, estarían dispuestas en crujía con una sola habitación por fondo y tenían en algunas ocasiones el tramo inferior soterrado o excavado en la roca. El recrecido de las paredes estaba realizado en mampostería o con encestado vegetal recubierto de manteado de barro. Los muros interiores eran de barro y la cubierta vegetal con tierra apisonada encima.
En las construcciones se encontraron numerosas pesas de barro que indicaban abundancia de telares domésticos, armas: lanzas, jabalinas, philum, soliferreum y falarica de hierro, glandes de plomo, así como algunas espadas, una de antenas atrofiadas y otra del tipo La Tène III, que acreditan una población en armas.
También se encontraron muchas herramientas para trabajos agrícolas y forestales: hoces, y muchos vasos celtibéricos con decoración rehundida de casquetes esféricos radiados de puntos, así como vasos pintados con animales o temas geométricos, monedas indígenas del tipo del jinete y una inscripción sobre piedra con el nombre RETUGENUS, en caracteres celtibéricos junto a vasos de cerámica común romana (ninguno de sigillata) y fíbulas y hebillas tanto celtibéricas como romanas.